Una persona que no siente atracción sexual hacia otros y hacia si misma, es considerada asexual. Este espectro suele ser mal entendido y poco discutido, llegando inclusive a la confusión, pues algunos creen erróneamente, que una persona es asexual si nunca siente atracción sexual o no es sexualmente activo.
La asexualidad es la falta de atracción sexual hacia otros, o el bajo o nulo interés o deseo por la actividad sexual. Puede ser considerada como la ausencia de orientación sexual o una de sus variaciones junto con la heterosexualidad, la homosexualidad y la bisexualidad
Las personas asexuales, definen su asexualidad como una de las formas de identidad que le son congruentes a sus sentimientos, sus relaciones y vínculos son basadas en el romanticismo sin tener a lo erótico como prioridad.
Basada en las investigaciones de Scott y Dawson, esto no necesariamente significa que las personas asexuales tienen una falta de interés por intimar o por componentes que ayudan a construir relaciones. “Esto no quiere decir que experimenten romanticismo o intimidad, sino que ese componente sexual, esa atracción sexual y deseo sexual pues no está presente para que ellos puedan desarrollar una relación o sentimientos hacia otra persona”, explicó por su parte la experta en sexología, Zuleyka Y. Valentín.
Según su orientación romántica, algunos asexuales se definen a sí mismos como heterorrománticos, homorrománticos, birrománticos y panromanticos, mientras que también existen otros asexuales arrománticos o no románticos que aparte de no sentir atracción sexual, tampoco sienten atracción romántica.
Dentro de los tipos de asexualidad tenemos:
Demisexualidad
Se da en personas que no experimentan atracción sexual salvo en casos en que forman una fuerte conexión emocional con alguien (sentimientos de amor romántico o en una profunda amistad) y entonces pueden “activarse” y sentir atracción y deseo sexual por este otro “especial” y mantener una vida sexual activa. Podría definirse como una asexualidad temporal hasta que conocen a la persona “adecuada”, ya que no experimentan atracción sexual primaria (apariencia del otro), pero si atracción sexual secundaria (conexión normalmente romántica o de la cercanía de dos personas en una relación).
Gris-asexualidad
Aquí los asexuales experimentan atracción sexual alguna vez, pero de bajo impulso sexual sin llegar a querer llevarlo a la práctica o en muy pocas ocasiones.
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